De la cabeza a los pies - Análisis de la toma de Protesta de Claudia Sheinbaum

Cuando pensamos en qué ponernos para un evento, normalmente pensamos en simplemente vernos bien, pero lo que no siempre consideramos es que no es el hecho de ponernos la ropa lo que importa, sino lo que comunica la ropa. ¿Por qué? Porque la ropa es un lenguaje en sí mismo.

Es por eso que, en su toma de protesta como Presidenta de México, Claudia Sheinbaum hizo elecciones calculadas y estratégicas que llevaron a que su imagen fuera reconocida como impecable, transmitiendo el mensaje correcto en cada detalle.

Así que hagamos un análisis de la cabeza a los pies para analizar todos los elementos que implementó y lo que comunicó:

Chongo:

El peinado recogido fue una elección que proyectó autoridad y formalidad. No era ni demasiado alto, lo que podría haber resultado impactante, ni demasiado bajo, lo que la haría ver excesivamente accesible. El pelo recogido a ella no le favorece, pero es parte de su campaña y de la autoridad que debe comunicar.   Además, evitó la cola de caballo que había utilizado en sus pósters de campaña, lo que fue un acierto para evitar caer en clichés.

Maquillaje:

El maquillaje fue profesional y justo el necesario. Cubrió imperfecciones, como ojeras, y abrió su mirada sin restarle naturalidad ni presencia. Aunque podría haberse visto con un poco más vida si le hubiera dado un toque más de blush o lipstick. 

Aretes y collar:

Optó por aretes pequeños y sencillos que representaron austeridad. Este detalle lo complementó correctamente con la ausencia de collar, una decisión correcta para que no compita visualmente con la banda presidencial.

Pulsera:

Esta sí, se la hubiera quitado. A menos que sea un hilo rojo de característico del Cabalá, pero creo que no es, ya que esa va en la muñeca izquierda y la de Claudia está en la derecha.

Anillo de casada:

El anillo de casada siempre comunicará, tanto para hombres como mujeres, responsabilidad y confianza, valores sumamente importantes para una figura política, ya que inconscientemente nos hace confiar en ella.

Uñas:

Las uñas naturales, pero perfectamente, proyectaron profesionalismo y discreción, asegurándose de no desviar la atención de su mensaje.

Vestido:

El que haya utilizado vestido me pareció la mejor decisión, porque representa que es la primera MUJER en ese cargo.

El vestido fue un homenaje a la identidad mexicana, al mismo tiempo que comunicó fuerza, feminidad y profesionalismo. Este vestido, diseñado por Claudia Vásquez Aquino, incluyó varios elementos clave:

•           Color blanco: Representó autoridad, honestidad, poder, paz y neutralidad.

•           Hombros estructurados: Proyectaron fuerza y presencia.

•           Manga larga: La opción más formal y autoritaria, además de que estiliza el cuerpo.

•           Corte midi: Perfectamente profesional.

•           Escote moderado: Una elección que resaltó la seriedad del momento.

•           Falda en A con vuelo: Agregó un toque de accesibilidad y movimiento.

•           Bordados florales oaxaqueños: Un guiño a los pueblos indígenas y un símbolo de feminidad y tradición.

Zapatos:

Los zapatos, en tono nude, estilizaron su figura y la hicieron ver más alta. La punta en pico siempre comunica autoridad, mientras que el tacón ancho aunque comunica mucha accesibilidad, fue una buena elección al ser zapatos cómodos y funcionales. 

Cada elemento de la vestimenta de Claudia Sheinbaum en su toma de protesta fue una declaración política, cultural y personal. Desde el peinado hasta los zapatos, todo estuvo cuidadosamente pensado para transmitir autoridad, inclusión, honestidad y feminidad. Esto demuestra como la ropa no solo es un accesorio, sino una herramienta poderosa para comunicar mensajes en los momentos clave de nuestra historia.

-La ropa manda mensajes claros.-